Que hacemos en el viaje

  
En el viaje combinaremos 

la exploración de nuestro sentir, escuchar y abrir el cuerpo 
con las prácticas energéticas como Chi-Kung y Tao Curativo, 
lugares del poder, la cultura de la Diosa, espacios en silencio y compartir,
abriéndonos a la conexión con nosotros y a la potencia y amor de la tierra

con  experiencias de placer y diversión 
como excursiones en silencio por la costa y espacios de naturaleza salvaje, las calas vírgenes, baños de barro, puestas del sol, tradiciones menorquinas en gastronomía y fiestas. Una de las tardes viviremos la experiencia de sentir el mar en una excursión en kayak.

Momento tras momento de este viaje disfrutando de las instantes de la vida en la magia de la isla. 

LAS MAÑANAS comenzaremos por abrirnos y llenarnos de energía con ejercicios de Chi-kung con vistas al mar. Luego procederemos a descubrir la historia y misterios de la antigua cultura talayótica, sus pueblos, templos, el culto a la Diosa y la sabiduría que nos revelan.

Cada lugar tiene energías muy distintas. Iremos descubriendo cómo abrirnos a sentir y conectar con ellos. Cómo leer las energías de cada lugar, abriendo a nuestras capacidades de la intuición y la visión, aprendiendo a escuchar de qué nos hablan y cómo utilizar estas energías para nuestros procesos internos, para nuestra sanación, apertura, la conexión con nuestro femenino  (en hombres y mujeres) y así ampliar nueva perspectiva del camino. La fuerza del grupo potencia esta experiencia y enriquece nuestra propia vivencia. 

Cada día vamos a visitar diferentes lugares de la cultura talayótica como Taulas, Navetas, Talayots, unas cuevas con el poder energético especial con la presencia de la energía de la Madre. También con una visita nocturna al santuario de la Diosa Tanit.

Todo el viaje tendrá un hilo conductor desde el primer día hasta el último lo que nos guiará a la profundidad de nuestra conexión con nuestro cuerpo, con la tierra y con el sentir profundo.


POR LA TARDE, disfrutaremos de paseos por la isla, por sus paisajes costeros con las playas más espectaculares con espacios vírgenes como Cala en Turqueta, Cala Mitjana, Trebaluger, Binigaus, Cavalleria, o Cala Pilar. 

La mayoría de los recorridos pasan por lugares no urbanizados, poco turísticos y se realizan en silencio.  En alguna cala desfrutaremos del baño de barro.


Cuando el día va terminando, despediremos el sol desde diferentes puntos de la isla, observando su fascinante espectáculo de colores con unas meditaciones y danzas.









                                                                              


No hay comentarios:

Publicar un comentario